Los distintos tipos de mentoring son herramientas para potenciar la motivación de las personas en el trabajo y aumentar la productividad empresarial. Todo, desde el relacionamiento entre personas hasta el intercambio de conocimiento.
De hecho, existen diversos tipos de mentoring que pueden ayudar a tu talento humano. Lo cierto es que más allá de las diferencias que existen entre ellos, todas estas modalidades de mentoría tienen como objetivo la búsqueda del máximo nivel de bienestar y productividad.
Para que conozcas cuáles son los tipos de mentoring, sus características principales y de qué modo puedes ponerlos en acción en tus grupos de trabajo, hemos elaborado este blog post. ¡Prepárate para saber cómo gestionar los tipos de mentoring en pos del beneficio organizaconal!
Mentoring formal e informal
El primero de los tipos de mentoring que te presentamos es el mentoring formal e informal. Por una parte, en el mentoring formal, el vínculo entre las personas que llevan a cabo la mentoría está enmarcado por la organización. Es decir, la misma empresa es la que establece el proceso de mentoring de acuerdo a un conjunto de necesidades específicas, previamente analizadas.
Asimismo, este es uno de los tipos de mentoring que implica un conjunto de evaluaciones para recabar datos de interés; y aplicar oportunidades de mejora para potenciales planes de mentoring.
En contraposición, el mentoring informal, si bien se ejecuta dentro del entorno de la compañía, no tiene límites estructurales delimitados como el mentoring anteriormente explicado.
De hecho, se trata de uno de los tipos de mentoring que suele darse en forma natural durante la cotidianidad de la relación entre el líder y las personas de la organización. Por ejemplo, cuando se produce una interacción a partir de dudas o consultas por parte del personal, o cuando se debe iniciar un nuevo procedimiento de gestión para el equipo de trabajo.
Como afirma una nota de Harvard Deusto, un buen líder debe fomentar la adquisición y el fortalecimiento de nuevas competencias en las personas de sus equipos. De este modo, será posible crear empresas ágiles que potencien la innovación y promuevan un clima laboral de bienestar a corto, mediano y largo plazo.
Mentoring entre pares
Este es otro de los tipos de mentoring que no podemos dejar de mencionar porque es una opción de crecimiento y aprendizaje profesional, que se presenta entre los mismos compañeros de equipo de una empresa.
En ocasiones, este tipo de mentorías se presentan sin roles asignados con antelación. Y en otras oportunidades, se establecen papeles específicos, como mentores y aprendices.
Siendo así, por medio de una buena comunicación, es posible fomentar el intercambio de saberes a través de la puesta en acción de los distintos tipos de mentoring.
En pocas palabras, el mentoring entre pares o también llamado "Peer to peer", permite optimizar la inteligencia relacional, fomenta el aporte de conocimiento teóricos y práctico entre personas de la misma jerarquía organizacional; y enriquece el crecimiento dentro de los grupos de trabajo.
Mentoring exprés
Entre los ejemplos de tipos de mentoring, se encuentra el mentoring exprés. Se trata de encuentros de poca duración, en los que se genera un intercambio de conocimiento sin estar en contextos formales de aprendizaje.
En efecto, estas sesiones de mentoring no tienen un seguimiento como el resto de las mentorías. Pueden ser, por ejemplo:
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Los típicos encuentros de formación que se presentan en congresos.
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Webinars.
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Talleres de aprendizaje sobre temas en particular, que son de utilidad para el talento y la empresa.
Según el portal de Forbes, la capacitación relacionada con las habilidades duras y blandas debe ser una de las principales prioridades de los departamentos de Recursos Humanos de las empresas.
En simples palabras, son tipos de mentoring de breve duración, en los que se incorporan conocimientos teóricos y prácticos, pero en los que no existe el tradicional entorno de aprendizaje del mentoring organizacional. Y como resultado, podrás recabar todos los datos de interés que necesitas para establecer tus necesidades de mentoría.
Cross mentoring
En esta guía sobre los tipos de mentoring, queremos destacar la importancia del cross mentoring o mentoring inverso como método de aprendizaje en el entorno empresarial según las necesidades de capacitación.
Particularmente, se trata de un mecanismo que implica un intercambio de mentores y aprendices de distintos sectores de la compañía.
El mentoring inverso es uno de los tipos de mentoring empresarial más usados, si se busca el enriquecimiento en el proceso de adquisición de conocimientos entre los diversos departamentos organizacionales y el mejoramiento del desempeño del equipo.
En el caso de que precises más herramientas para medir el nivel de satisfacción en el ambiente de trabajo, puedes descargar en forma gratuita el Test para medir el clima organizacional.
Fuente: Crehana
Mentoring grupal
Otro de los tipos de mentoring que no puede quedar sin analizar, es el mentoring grupal. En este la práctica versa sobre la relación entre el mentor y un grupo de personas que participan en un mismo proyecto o actividad.
En este sentido, las reuniones en grupo son las más adecuadas para el mentoring de emprendedores, ya que incita a que los colaboradores que participan en ellas compartan información valiosa. Y gracias a ello, incrementa la posibilidad de éxito de sus integrantes.
Recomendaciones para aplicar los tipos de mentoring dentro de la empresa
Como en cualquier otro proyecto que tengas y quieras ejecutar dentro de la compañía, en la aplicación de los diferentes tipos de mentoring también debes contar con unos objetivos y unas directrices para conseguir los resultados deseados en el proceso.
Para que puedas planificar correctamente la aplicación de algunos de los tipos de mentoring, a continuación encontrarás algunos pasos que harán tu proceso más sencillo:
1. Establece objetivos
Como HR Manager de la empresa tienes la responsabilidad de encargarte de establecer los objetivos para el programa de mentoring, de forma que en un plazo razonable se pueda medir el resultado. Algunos ejemplos de objetivos pueden ser:
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Desarrollar habilidades específicas inherentes a la actividad de la compañía.
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Adaptar los equipos de trabajo al cambio.
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Desarrollar carreras.
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Retener y fidelizar a los colaboradores de la empresa.
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Aumentar el rendimiento de los equipos.
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Fomentar la inclusión y la diversidad.
Independientemente de los objetivos que establezcan para la aplicación de cualquiera de los tipos de mentoring, recuerda que estos deben ser realistas y alcanzables en un tiempo determinado.
2. Identifica a los mentores y a los mentorizados
Una vez establecidos los objetivos del programa de mentoring es el momento de identificar a los mentores, es decir, a aquellos colaboradores con más experiencia y habilidades. Tal vez, muchos empleados están interesados en participar como mentores, así que puedes lanzar una invitación para formar parte del programa de aplicación de los tipos de mentoring. Recuerda, los mentores deben ser responsables, expertos y en posiciones de dirección.
Luego, tendrás que identificar a los mentorizados. En ocasiones, te resultará eficaz elegir a nuevos colaboradores, aquellos que se hayan incorporado hace poco a la empresa o acaben de hacer el onboarding, y en otros momentos, puede que busques potenciar un determinado tipo de habilidades dentro de los miembros de tu equipo más antiguos.
En este sentido, la elegibilidad de los mentorizados estará directamente relacionado con el tipo de objetivos que quieres alcanzar.
3. Capacita a tus mentores
Una pieza clave en la aplicación de los diferentes tipos de mentoring es la capacitación que se brinda a los mentores designados. En este sentido, los mentores deben recibir una formación adecuada con respecto al programa de mentoring para ejercer su rol de la mejor manera posible.
Entre los aspectos que debe manejar un buen mentor para hacer del proceso un programa más efectivo, son los siguientes:
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Definir un estilo de mentoría.
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Establecer expectativas y objetivos entre mentor y mentorizado.
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Interesarse por la situación personal y profesional del discípulo.
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Saber detectar cuando los participantes necesitan un consejo o directriz en el programa de mentoring.
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Ser honesto sobre los errores cometidos, pues enseñar con el ejemplo será más efectivo para el equipo.
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Celebrar los logros alcanzados durante el programa por más pequeño que sea como forma de incentivar al grupo.
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Comprométete con los resultados para que tu mentorizado también lo haga.
Estos son algunos de los aspectos que debe trabajar un mentor previo a iniciar el programa de mentoring con su equipo, pues garantizan la obtención de mejores resultados a largo plazo.
De ahí la importancia de la capacitación corporativa, sobre todo cuando se habla de inteligencia emocional y desarrollo personal de tus colaboradores.
4. Asignación de parejas y creación del plan
Una vez que tengas los dos grupos ya sólo tendrás que crear las parejas de mentor-mentorizado y crear con ellos un plan específico. Como HR Manager puedes ayudar al mentor a establecer las necesidades de desarrollo profesional o de habilidades específicas para el mentorizado.
Después, será el mentor el encargado de crear un cronograma con las directrices que debe seguir el colaborador mentorizado para alcanzar los objetivos.
5. Acciones y calendario de reuniones
Gran parte de la actividad entre el mentor y mentorizado se desarrollará a través de reuniones en las que se realizará un seguimiento del plan acordado. Contar con calendario o cronograma así como con plantillas de agenda de reunión, ayudará a establecer una guía para cada encuentro.
6. Ejecuta tu tipo de mentoring
Una vez que tienes todos los pasos anteriores resueltos, solo debes proceder a aplicar cualquiera de tus tipos de mentoring, según hayas elegido. En este sentido, tu rol será muy importante para poner en marcha el programa de mentoring y hacer seguimiento a sus avances.
7. Revisa el progreso
Es importante que durante la ejecución del programa de mentoring, se revise la evolución del mismo cada cierto tiempo, de forma que se puedan corregir determinadas situaciones y hacer cambios para ayudar a los mentores y mentorizados.
En este sentido, deben analizarse aspectos como por ejemplo:
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Tareas y actividades asignadas: verificar la evolución de cada aspecto que comprenden estas tareas y actividades, así como los proyectos compartidos con otros grupos.
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Plazos de tiempo: debes enfocarte en que los períodos de tiempo establecidos para cada actividad se estén cumpliendo o si hay retrasos que deban evaluarse para hacer los cambios correspondientes.
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Logros alcanzados: procura estar al día de los avances y sobre todo de los objetivos logrados para felicitar y motivar a tus equipos a continuar.
Implementar los tipos de mentoring dentro de tu empresa no debe convertirse en un proceso complicado y tedioso si se comparten responsabilidades y se trabaja en pro de cumplir los objetivos en los plazos definidos. Recuerda, lo más importante de todo proceso que implementes en la compañía es que hagas un buen acompañamiento y resuelvas las situaciones que se presenten en el camino.
En resumen, los distintos tipos de mentoring en las empresas son herramientas que debes tener en cuenta en función de las necesidades individuales y grupales de tu capital humano.
El camino para el éxito de tus equipos y de tu empresa está determinado por la educación, el esfuerzo y la motivación.
Entonces, no olvides elegir los tipos de mentoring organizacional más adecuados para tus equipos según sus características y necesidades. Y como resultado, alcanzarás cada una de las metas empresariales que te propongas con éxito.
¡Éxitos!