¿Has escuchado hablar del meta aprendizaje? ¿Sabes a qué se refiere? No es un concepto nuevo, pero se encuentra gozando de buena salud en los últimos años.
Los procesos de aprendizaje son materia de deliberación académica en un espectro enorme, que va desde la psicopedagogía hasta la neurociencia. El meta aprendizaje es un concepto que encuentra allí sus raíces y se dirige hacia el individuo que aprende: ¿cómo estudiamos y cómo aprendemos? ¿Cómo gestionamos los materiales para estudiar? Esas son algunas de las preguntas que busca responder.
La meta: que aprendamos sobre la forma en la que aprendemos. Por eso, hoy te vamos a explicar el meta aprendizaje y sus dinámicas. Repasaremos las principales características de meta aprendizaje y veremos algunas claves para ponerlo en práctica.
¿Estás preparado para transformar la forma en la que aprendes las cosas?
¿Qué es el meta aprendizaje?
El meta aprendizaje es definido en 1984 por Novak y Gowin en su libro “ Aprendiendo a aprender” como “el aprendizaje relativo a la naturaleza del aprendizaje”. Parece redundante, pero en realidad hace referencia a la capacidad de evaluar el propio recorrido de aprendizaje, con la finalidad de hacerlo de forma más consciente para ganar eficiencia y eficacia.
La metacognición en el aprendizaje hace referencia a la búsqueda de nuevas posibilidades para la construcción del conocimiento, de allí la existencia de diversas estrategias meta cognitivas, cuyo fin es construir el los alumnos conciencia sobre su trayecto, una de ella es el meta apredizaje.
En el cruce entre metacognición y autorregulación del aprendizaje se encuentran estas perspectivas. Proponen que lo primero, antes de estudiar, es aprender a aprender. Para ello es necesario descubrir cómo se estructura el conocimiento en el área que se desea estudiar. Al fin y al cabo, el meta aprendizaje, es la capacidad de comprender lo que se va a estudiar, cómo se va a estudiar, qué se necesita para aprenderlo y cuáles son las formas posibles de hacerlo.
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Los 7 objetivos del meta aprendizaje
Entonces, ¿cómo funciona el meta aprendizaje? Originalmente diseñadas para su aplicación en el estudio de las matemáticas y las ciencias duras; el meta aprendizaje funciona al definir siete objetivos, en los que desglosa la finalidad del estudio. Son los siguientes:
1. Resolver el problema/comprender el fenómeno. La primera meta es asegurar la resolución o la comprensión del material que tenga enfrente el alumno.
2. Asegurar la validez de los argumentos. El segundo objetivo es revisar la validez de las premisas utilizadas para fomentar el desarrollo del pensamiento crítico.
3. Asegurar la comprensión de lo estudiado. El tercer paso corresponde al momento de incorporación del conocimiento, el meta aprendizaje no quiere alumnos que repitan de memoria, sino que busca la comprensión.
4. Organizar el conocimiento. Se deriva del anterior y es la jerarquización de lo aprendido, una vez que comprendemos lo estudiado, se organiza y se ubica con respecto al background de conocimientos de quien estudia.
5. Evitar errores. Se repasan los errores comunes y se pule allí donde haga falta.
6. Gestionar el meta conocimiento.La meta cognición y aprendizaje se cruzan para revisar el conocimiento sobre el conocimiento y los métodos del alumno.
7. Motivar y controlar percepciones negativas. La última meta del meta aprendizaje es que los alumnos se sientan bien y cómodos con lo que estudian, controlando aquellos factores que pueden hacerlos desistir.
“Para lograr las metas de aprendizaje es necesario aprender herramientas para distribuir el tiempo, adecuar espacios, optimizar recursos y poner en práctica diversas técnicas de estudio; métodos y formas de organización diversas para sacar tus proyectos adelante”, asegura Antonio Ortiz, tutor de nuestro curso online de Autogestión del aprendizaje. Si llegaste hasta aquí deseando mejorar la forma en la que estudias, el know-how de Antonio es justo lo que necesitas.
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¿Cómo diseñar un mapa de meta aprendizaje?
Para diseñar un mapa de meta aprendizaje, como se explica en Arata Academy, puedes consultarle cómo se desarrollan a profesionales, personas que admiras y que llama la atención. Pero lo importante, recuerda, es que no te debes preocupar por crear el mapa perfecto de entrada.
El meta aprendizaje también se trata de evaluar constantemente, y poder cambiar de dirección. El mapa perfecto no existe, porque a medida que vas aprendiendo pueden ir cambiando las orientaciones que te mueven. Pero, para empezar a diseñar un mapa de aprendizaje autónomo, te ayudará encontrar la respuestas de estas preguntas:
- ¿Qué hago? Define qué materiales y contenidos se ponen en juego en el proceso de estudio.
- ¿Dónde y cuándo? Ubica los espacios y momentos de estudio para encontrar la distribución indicada de tiempo.
- ¿Qué siento? Analizate internamente para descubrir cuáles son las emociones que te atraviesan y cómo te afectan en el proceso de aprendizaje.
- ¿Cómo lo hago? Encuentra y define los métodos que necesitarás para estudiar lo que tengas que aprender.
- ¿Por qué y para qué lo hago? La fijación de metas es un elemento clave, para descubrir la motivación inicial y la motivación desarrollada en el proceso. No hay nada como hacer metas de aprendizaje para descubrir qué es lo que nos motiva a estudiar.
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Hemos finalizado. Ya entiendes el meta aprendizaje. ¿Qué piensas? Porque sobre el meta aprendizaje hay opiniones encontradas: la neurociencia es un ámbito que cuenta con tantos desarrolladores como detractores. Por nuestra parte, creemos que dominar el meta aprendizaje es una herramienta que te será muy útil para toda la vida.
Porque lo más lindo es estudiar es que puede ser para toda la vida, porque siempre es lindo cultivar los conocimientos, te invitamos a formar a tus equipos con nuestros cursos online de Soft Skill. Construye una organización con las herramientas para enfrentarse a cualquier situación y verás como mejoran los resultados.
¡Adiós!