Definir qué es capitalizar puede parecer algo complejo, pero en realidad no lo es tanto. Sucede que capitalizar es una palabra que proviene del vocabulario económico y se utiliza de muchas maneras en el mundo empresarial.
Verás, se habla de capitalizar intereses y también de capitalizar pasivos, haciendo referencia a conceptos monetarios; pero también se habla de capitalizar fortalezas y capitalizar el conocimiento, que tienen que ver estrictamente con lo económico.
¿Qué significa capitalizar entonces? Hoy lo descubriremos. Te contaremos qué es capitalizar y despejaremos dudas sobre el uso de la palabra. Luego, veremos cuáles son las formas en la que se lo puede realizar. Cuando lo finalices, estarás seguro de entender qué es capitalizar. ¡Vamos a verlo!
¿Qué es capitalizar en contabilidad?
Por todo esto, aunque la palabra capitalizar y capitalización sean tan usadas, si nos preguntamos qué es capitalizar, debemos responder que es el proceso mediante el cual una determinada cantidad de capital aumenta su valor. Es la proyección de un capital de inversión, en un período de tiempo determinado, con respecto a un tipo de interés.
¡Es fácil! ¿Qué es capitalizar? Aumentar un monto de dinero inicial mediante una inversión. Acorde a Economipedia, se trata de la expresión matemática de un fenómeno real.
Y, ¿cuál es la confusión? La confusión nace porque capitalizar se usa como sinónimo de cualquier tipo de beneficio generado. Por ejemplo: ¿que es capitalizar una idea? Probablemente allí se refiera a explotarla, aprovecharla o sacarle el máximo rédito. Pero desde una perspectiva financiera queda claro que capitalizar es aumentar un monto mediante intereses.
Y es importante reconocer que capitalizar es una acción que funciona solo cuando el monto del capital económico aumenta. Por ejemplo, si uno invierte a modo de capital semilla en una empresa, obtendrá diferentes beneficios según el trato, pero a menos que esa inversión genere intereses y sea devuelta, no hablaremos de capitalizar.
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Diferencia entre capitalizar y capitalización
A veces, también parece que capitalizar es sinónimo de capitalización. Pero no, y aunque capitalización sea el resultado de la acción de capitalizar, no todas las veces que se utiliza hace referencia a tal hecho consumado.
Por ejemplo, tenemos la capitalización bursátil o capitalización de mercado, que es, según la información de Economia.org, es “una medida de una organización empresarial y se expresa la multiplicación del precio de sus acciones por el número de acciones en un momento determinado”.
Conocer estos términos nos servirá si estamos valuando una empresa, pero no tienen relación con lo que es capitalizar en términos contables.
Tipos de capitalización
Ahora, si hay una empresa que quiere capitalizar algún monto de inversión determinado, es importante reconocer que hay tres formas de capitalización que marcan las posibilidades de calcular y generar ingresos con los intereses. Estamos hablando de la capitalización simple, la capitalización compuesta y la capitalización continua. Veamos cada una en su particularidad.
Capitalización simple
La forma de capitalizar que es llamada simple, se suele utilizar para periodos menos a un año, y los intereses que se generan son proporcionales a la duración y al capital inicial.
Lo decisivo de la capitalización simple es que no capitaliza los intereses generados. Los intereses se calculan sobre el capital inicial y el monto generado será siempre el mismo en un mismo período de tiempo.
Un ejemplo de lo que es capitalizar de forma simple funcionaría de esta manera, vamos a ponerlo simple: si se invierten 1000 dólares a lo largo de un año, con una tasa de interés al 5%, el capital final sería de 1050 dólares.
Capitalización compuesta
La capitalización compuesta, en cambio, capitaliza también los intereses generados, según ciclos. Es decir que los intereses generados en un período, se suman al capital inicial para el período siguiente: los intereses generan más intereses.
Esta variante para capitalizar, que es utilizado para periodos largos, genera mayor capital final que la capitalización simple, ya que a cada período el capital inicial sobre el que se generarán intereses será mayor. Retomemos el ejemplo anterior: si finalizar el ciclo de un año, aún siguiera la fórmula, ese segundo año empezaría con un capital inicial de 1050, por lo que al finalizar el segundo año el capital final sería de 1102,5, y no 1100 como sería el resultado de la capitalización simple.
Capitalización continua
Hay una tercera forma de capitalizar un interés, que es la capitalización continua y ¿Cómo se calcula? Es sencillo: los intereses se reinvierten de forma constante.
Se diferencia de la capitalización compuesta porque no espera al cierre de ciclos para sumar los intereses al capital inicial, sino que los reinvierte automáticamente. De forma lógica, la fórmula para capitalizar que es más rentable es la capitalización continua, ya que los intereses se van acumulando todo el tiempo.
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¡Hemos terminado! Ahora ya sabes qué es capitalizar y cuales son los modos en los que el interés puede aumentar el capital final. En ocasiones, al escribir esto, de tanta repetición, se me ha perdido el sentido de capitalizar y capitalización. Esa extrañeza que aparece al decir muchas veces una misma palabra. Más allá de esa momentánea confusión, ahora ya sabemos de qué se trata capitalizar un monto.
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