La autonomía en el trabajo es una excelente decisión adoptada por las empresas de gran tamaño en la actualidad. En un mundo corporativo que se encuentra cambiando constantemente, reforzar la relación entre tus empleados y tú puede significar el impulso decisivo que lleve a tu compañía al éxito.
Aunque no implica dejar que los empleados hagan lo que quieran, ni mucho menos es sinónimo de independencia. La autonomía en el trabajo se trata de concederles a tus empleados la confianza suficiente para que se sientan valorados por la empresa, al tiempo que desarrollan todo su potencial y sus capacidades en el ámbito de una tarea que requiera de sus habilidades. Siendo esto beneficioso tanto para ellos como para la compañía.
En este blog post te enseñaremos cómo fomentar la autonomía en una empresa constituida por más de 500 colaboradores y te daremos las herramientas necesarias para aplicar correctamente esta iniciativa en tu compañía.
Reconoce los sentimientos negativos con relación a los proyectos
No todas las tareas laborales se abordan de la misma manera y, siendo unas más tediosas o complejas que otras, pueden generar un sentimiento de frustración.
Si como manager de recursos humanos percibes esta situación, tómate el tiempo suficiente para reconocer estas sensaciones en tu equipo y busca establecer las mejores soluciones con tus empleados para lidiar con la situación.
Concede a tus empleados la organización de su tiempo y sus tareas
Es poco probable que los empleados elijan las tareas que les asignan. Una buena manera de mantener la autonomía de los colaboradores es dejar que controlen su flujo de trabajo y estructuren su tiempo a su manera.
Deja que desarrollen sus responsabilidades y programen sus tareas laborales para ejecutarlas en función de su disponibilidad. Eso sí, asegúrate de que se cumplan los objetivos estipulados durante la semana, por lo que una buena idea es programar reuniones para actualizar objetivos y comentar acerca de su estrategia para completar sus proyectos.
Ejerce la crítica constructiva en privado
En todo proceso de trabajo suelen haber equivocaciones. Algunas inofensivas, otras más graves; pero eso no es excusa para criticar, de forma destructiva, la opinión o conducta de un empleado en el entorno laboral.
Esta conducta limita la iniciativa de tus trabajadores, al sentirse agobiados por sentimientos negativos como la furia o el miedo. Tu misión es mantener un equipo comprometido y con autonomía en el trabajo, por lo que debes señalar los fallos en privado y asegurarte de mantener la moral alta, para que no decaiga el compromiso en el entorno laboral.
Apuesta por la construcción de la confianza
No puede haber autonomía en el trabajo si no hay confianza. Aunque esta es una especie de tema contractual, en el que existen dos partes involucradas.
Si eres empleado, debes confiar en tu jefe y viceversa. Te aseguramos que si confías en tus trabajadores, estos sentirán ese respaldo, pero nunca debes aprovecharte de eso.
Apela al sentimiento de propiedad
El sentimiento de propiedad va de la mano con la pertenencia de cada trabajador a la empresa. La misión del líder es otorgar un sentimiento de autonomía de los colaboradores, que les demuestre que cuentan con la total confianza de la compañía.
Básicamente, es buscar que el empleado sienta los proyectos como propios, en lugar de hacer "una tarea de la empresa". Por ejemplo, aprovechar las aptitudes de un nuevo empleado y presentarle la asignación como una oportunidad para que utilice sus habilidades en beneficio de cientos o miles de empleados.
Además, busca ofrecer a tus empleados la oportunidad de alcanzar sus metas, en el entorno laboral, con todos los recursos disponibles. Bríndales la formación y la tecnología necesaria para que sienta que la empresa "invierte" en ellos y apuesta por su capacidad.
No des marcha atrás si ya concediste la autonomía laboral
Hay un punto crucial en el tema de la autonomía del trabajador. Si ya le has concedido la libertad para que desarrolle su toma de decisiones dentro de la compañía, no retires ese privilegio.
Si te arrepientes de tu conducta, estarás afectando el compromiso de tus empleados. Así que ten cuidado y apuesta por seguir adelante, si ya tomaste la decisión de conceder la autonomía laboral.
Implementa pautas y lineamientos claros
Es esencial que existan unos lineamientos claros sobre lo que se espera de los trabajadores y los diversos compromisos que debe asumir el personal de tu empresa. Este es uno de los puntos más importantes que debes seguir a cabalidad para obtener los mejores resultados posibles al momento de dar autonomía a los colaboradores.
Muchas compañías no son conscientes de lo que pretenden o no tienen claras las metas que desean lograr, ni el período de tiempo en el cual esperan hacerlo. Esto dificulta sobremanera el grado de autonomía de los colaboradores, pues si sus líderes no tienen claros los propósitos, ¿cómo pueden saber los empleados a qué se están comprometiendo?
Pues es tu trabajo como líder dejar clara esta postura. Una buena opción es trabajar en conjunto con tu equipo y enumerar cuáles son las responsabilidades a cumplir, así como el hecho de las consecuencias de no cumplir con las expectativas. En caso de que no se cumplan los objetivos estipulados, los responsables de los equipos de trabajo estarán en capacidad de asumir la responsabilidad.
Identifica en qué áreas de la empresa puedes aplicar la autonomía laboral
Saber de qué forma emplear la autonomía en el trabajo es fundamental para que esta metodología tenga éxito. Pero también es bueno saber en qué sectores de la empresa funcionan mejor este tipo de medidas.
Hay dos ámbitos en la empresa donde te vendrá de maravillas aplicar la autonomía laboral:
1. En la estrategia
Muchas corporaciones grandes y exitosas cuentan con equipos autónomos, dedicados de forma exclusiva a la estrategia. Así que, es una de las maneras en las cuales puedes mantener empleados empoderados y con capacidad de tomar decisiones propias.
Así, contarás con un grupo (puede abarcar de 5 a 8 personas, por ejemplo) que se encargará principalmente de evaluar todo tipo de situaciones y escenarios potenciales, además de ubicar las innovaciones que se pueden aplicar para el manejo de los negocios empresariales. Todo esto, pensando en que se pueda generar un mayor beneficio para la compañía.
2. En la gestión
En este punto es donde la autonomía de los colaboradores cobra un valor importante, ya que este grupo tendrá a la mano las herramientas adecuadas para mantener una mejor distribución de las tareas y priorizar las actividades más importantes.
Asimismo, este equipo de trabajo tendrá la capacidad de elegir los recursos adecuados para garantizar un rendimiento adecuado de los proyectos en cuestión. Dentro de la gestión, es clave tanto el liderazgo del líder de equipo como el nivel de autonomía de los colaboradores.
Como menciona Jennifer Seguel, Talent Acquisition en Factorial HR, citada en nuestra guía para construir equipos autónomos, “si el equipo va consiguiendo las metas fijadas sin que los líderes de equipo se ocupen de la parte de ejecución y sólo se hayan centrado en la estrategia y la planificación, eso quiere decir que, efectivamente tenemos un equipo autónomo”.
Fuente: Crehana
Distingue entre independencia y autonomía laboral
Una mayor autonomía en el ámbito laboral tendrá una incidencia positiva en tus empleados e impulsará los niveles de motivación, eso está claro. Pero, como te mencionamos anteriormente, son muchas las personas que confunden el ser autónomo con otros conceptos.
La autonomía en el trabajo cuenta con muchas actividades favorables para el empleado. Sin embargo, autonomía no es sinónimo de:
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Trabajar de forma aislada: la autonomía de los colaboradores no incluye el derecho de realizar sus labores sin supervisión.
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Hacer lo que quieran, cuando quieran: es importante que se definan las condiciones de la autonomía de los colaboradores, antes de la toma de decisiones.
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Funcionar sin orientación: los empleados deben ejercer sus funciones con una orientación clara y precisa, con procesos establecidos y siguiendo las normativas determinadas.
¿Qué significa actuar con autonomía? Se trata de que el trabajador se sienta libre de tomar decisiones, para garantizar un mayor compromiso con su trabajo. No de trabajar en una empresa anárquica, sin dirección ni objetivos claros.
Permite que tus colaboradores elijan su modalidad de trabajo
En la actualidad, muchas empresas están ofreciendo a su personal la posibilidad de mantener una relativa autonomía laboral, dentro del cumplimiento de sus funciones. Entonces, ¿este es el camino a seguir dentro de los grandes entornos laborales?
Tras la crisis sanitaria generada por el COVID-19, los entornos laborales cambiaron, por lo que las compañías empezaron a adoptar modalidades más flexibles para los trabajadores, apostando por darle mayor libertad en lo que se refiere a la toma de decisiones durante el cumplimiento de sus funciones.
Por este motivo, tanto el trabajo remoto como el híbrido han adquirido tanta fuerza para las empresas. Como revela el portal Forbes, "los empleados quieren flexibilidad, autonomía y libertad para decidir cuándo trabajar de manera remota y cuándo hacerlo desde la oficina". Yendo más allá, el medio asegura que "más de un tercio de los trabajadores indican que estarían dispuestos a renunciar si su organización los obligara a laborar en su sitio de trabajo 100% del tiempo".
Por ende, el teletrabajo y la flexibilidad laboral son medidas que están instauradas dentro de las empresas de gran tamaño. Y es en estos entornos donde la autonomía de los colaboradores debe ser tratada de la mejor forma posible, mediante un liderazgo firme y una confianza sólida en el rendimiento del empleado, que facilitará el cumplimiento de los objetivos.
Cultiva una mentalidad de crecimiento
Una mentalidad de crecimiento especifica que la habilidad y la inteligencia son facultades que se pueden desarrollar. Las mentalidades fijas, por el contrario, se centran en la creencia de que la habilidad y la inteligencia son inherentes y que las personas no pueden desarrollarlas.
Un empleado alentado a una mentalidad de crecimiento está posicionado para desarrollarse y se esforzará por ir más allá de donde está hoy. Esto es importante por varias razones, específicamente en lo que respecta al desarrollo de habilidades y autonomía en el trabajo.
Proporciona apoyo y asesoramiento cuando sea necesario
Un buen líder entiende cuándo es el momento de intervenir y brindar apoyo. Reconoce cuándo demasiada autonomía en el trabajo conduce a la desorganización y apunta a prevenir esto.
La autonomía no significa que no se requiera un liderazgo externo, sino que depende de la situación. Si un equipo o un individuo se estanca, la ayuda externa está bien. Un líder puede monitorear el progreso sin interferir e intervenir cuando sea necesario.
Si un líder interviene, no debe ser para tomar el control. Debe ser para ofrecer orientación y ayudar a que el proyecto marche bien. Incluso cuando se cometen errores, los fracasos deben verse como una oportunidad de aprendizaje y crecimiento. Una vez que el proyecto siga su curso, el líder puede dar un paso atrás y volver a permitir la autonomía laboral.
Establece objetivos y puntos de referencia
Cada proyecto, sin importar cuán grande o pequeño sea, debe tener objetivos y puntos de referencia. Una tarea es más manejable cuando hay puntos claros de progreso que actúan como una guía para dirigir el impulso. Si está claro hacia dónde se dirige un proyecto, decidir cómo llegar allí es mucho más simple.
Es importante que los individuos y los equipos decidan sus propios objetivos, aunque un líder puede estar presente para verificar la decisión. Pero los objetivos también son flexibles. A medida que evoluciona un proyecto, puede ser necesario ajustar la ruta original. Esta es una de las formas sobre cómo mejorar la autonomía en el trabajo y avanzar hacia el éxito.
Los puntos de referencia son tan importantes como las metas. Una vez que se logra el progreso, se crean naturalmente puntos de referencia para el desempeño. Estos puntos de referencia deben registrarse y consultarse para todos los proyectos futuros. Los empleados que entienden su propio potencial se esforzarán por lograr el mismo resultado o mejorarlo.
Gracias al uso de un software de evaluación de desempeño, las empresas grandes pueden identificar oportunidades de mejora y establecer planes de desarrollo para sus empleados de manera más efectiva.
¿Quieres empoderar a tus empleados y líderes con feedback objetivo y oportunidades de crecimiento claras? Nuestras soluciones de clima y desarrollo te ayudarán a crear un ambiente laboral donde cada miembro del equipo se sienta valorado y tenga la posibilidad de crecer profesionalmente mientras trabaja con autonomía.
Plataforma Desarrollo de Crehana
Permite los errores
Los errores también son la forma en la que tus empleados aprenden y mejoran como profesionales. En caso que ocurra el error, en vez de optar por el enojo, conversa con ellos y definan soluciones claras para prevenir el mismo inconveniente.
Dale la confianza a tu equipo para que se equivoque, de esta manera también aprenderán a tomar decisiones rápidas que los ayuden a solucionar esos imprevistos.
Recuerda que la delegación de tareas debe basarse en la responsabilidad, no en el castigo. Si se cometen errores, una persona no debe temer la culpa. En cambio, los errores deben abordarse como una oportunidad para aprender y mejorar el desempeño futuro.
Si se asignan culpas y castigos por los errores, esto solo desalentará la autonomía en el trabajo, el libre pensamiento y la creatividad en el futuro.
Deja que los empleados elijan sus beneficios laborales
Permitir que los empleados elijan sus propios beneficios laborales es poner el poder en sus manos. No todos aprecian los mismos beneficios. Por lo tanto, agrupar a toda una fuerza laboral en el mismo plan de empleo no siempre es la mejor estrategia.
Nada satisface más a una persona que la libertad de elegir un plan de beneficios para empleados que se adapte a sus necesidades. Sin duda, es una gran forma sobre cómo mejorar la autonomía en el trabajo.
Premia la autonomía de tus colaboradores
El reconocimiento de los empleados los anima a seguir cumpliendo sus funciones. Además, el reconocimiento hace que tu personal quiera quedarse en tu empresa.
Puedes recompensar la autonomía otorgando a un empleado mayores responsabilidades o permitiéndole más libertad una vez que demuestre que puede tomar decisiones inteligentes para la compañía. Dar retroalimentación individual también puede ayudar a los empleados a desarrollar autonomía en la empresa.
Ofrece las herramientas para trabajar de forma autónoma desde cualquier lugar
Si bien el 71 % de la fuerza laboral global ahora ve el espacio físico de la oficina simplemente como un servicio social en lugar de una forma obligatoria de trabajar, el 85 % siente que tener confianza en su tecnología les permite sobresalir en el trabajo, según datos de HBR.
El hardware que necesita el trabajador moderno debe ser flexible, inalámbrico y dinámico. Ahora los empleados necesitan computadoras portátiles que sirvan como fuente de energía para sus operaciones de trabajo y, posiblemente, una computadora de escritorio en la ubicación que sirva como su espacio de trabajo más común.
Además de esto, los periféricos inalámbricos (auriculares, cámara de video, teclado, mouse, etc.) que se pueden transferir entre sus diferentes entornos laborales ayudarán a garantizar que puedan permanecer conectados sin anclarse demasiado en ninguna ubicación, y así facilitar su autonomía en el trabajo.
A medida que los líderes continúan repensando sus necesidades y estrategias de trabajo híbrido, es necesario que brinden a los empleados las herramientas y tecnologías adecuadas para que puedan ser autónomos, eficientes y estén conectados desde cualquier lugar.
Al final del día, depende de cada organización determinar qué enfoque tiene más sentido en el contexto de su cultura, industria y propósito general. Pero para aquellas organizaciones cuyos empleados han expresado un deseo de mayor flexibilidad, habilitar la autonomía en el trabajo será más crucial.
Las grandes organizaciones que brindan a los empleados la autonomía laboral para elegir su forma ideal de trabajar y los apoyan con los principios, la capacitación y las herramientas correctas darán como resultado una fuerza laboral más flexible, más motivada y de mayor rendimiento.
El bienestar de tus empleados debe ser una de tus máximas prioridades, pues es la mejor forma para cumplir con los objetivos empresariales y mantener un personal que ofrezca un rendimiento óptimo. Como bien menciona nuestro profesor Diego Dalman, "una fuerza de trabajo saludable y feliz es una fuerza de trabajo motivada. No solo entrega resultados, sino que también innova continuamente".
Y, para ello, una de las acciones que puede favorecerte es aplicar la autonomía laboral, la cual garantiza un mayor compromiso de los trabajadores y un incremento en la productividad de la empresa. Si bien pueda parecer que ofrecer este nivel de empoderamiento al personal puede resultar contraproducente, son muchas las ventajas de este método empresarial, si se ejecuta adecuadamente.
Por ello, te recomendamos que trabajes en la capacitación de tus empleados y evalúes bien a tu equipo de trabajo. Te aseguramos que, si están dadas las condiciones, esta autonomía laboral puede ser un paso adelante para tu compañía.
¡Éxitos!