¿Ya no sabes qué más hacer en estos días de aislamiento? Si eres de los que ha visto varias películas y ha terminado de ver todas las series que tenía pendiente y ahora está buscando algo diferente para hacer, has llegado a la nota indicada.

Sabemos que trabajar desde casa puede ser agotador, sobre todo en el contexto en el que nos encontramos. Adaptarse a una nueva forma de trabajo no es sencillo. Entonces, acudir a las plataformas de entretenimiento para despejar nuestra mente se vuelve repetitivo. ¿Y si nos decidimos por otras opciones?

Recuerda que, si estás en casa, es debido al brote del COVID-19; no porque te encuentres de vacaciones. Así que, si consideras que puedes hacer otras actividades más minuciosas, como avanzar tu tesis o armar un proyecto, ¿por qué no intentarlo?

Por el contrario, si lo que necesitas son actividades que sean menos demandantes —porque ya tienes suficiente estrés debido a la cuarentena—, es mejor que optes por la más flexibles, como estudiar los  cursos gratis que tenemos todos los días, crear tu portafolio u optimizar tu perfil en LinkedIn. La idea es hacer algo que nos mantenga concentrados, sin descuidar nuestra salud mental.

En esta nota te recomendamos algunas actividades que puedes iniciar o continuar. Elige una que puedas cumplir y ¡manos a la obra!

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1. Retoma tu tesis

“¿Cómo vas con tu tesis?” es la pregunta que, a menudo, acecha a todos los que todavía no han podido terminarla. Cuenta la leyenda que ningún tesista puede tolerarla, sobre todo, si han pasado meses (incluso años) y solo ha avanzado el 20%. Si consideras que esta actividad es una buena opción para ti, aquí te dejamos algunos consejos para que retomarla no sea tan complicado:

- Organiza tu tiempo. Dedícale a tu tesis un par de horas todos los días. Por ejemplo: después de trabajar en casa, date una hora de descanso. Así estarás más fresco para volver al escritorio y avanzar tu investigación.

- Establece un espacio de estudio adecuado. ¿Puedo avanzar mi tesis en la cama? Suena tentador, pero no es lo correcto. Es importante que uses un escritorio y una silla, para que puedas escribir como se debe.

- Dale una lectura antes de retomarla. Si tuviste que dejar tu tesis durante un tiempo prologando, es mejor que la leas antes de empezar a escribir. Esto te ayudará a refrescar algunos detalles y a detectar algunos posibles errores de redacción.  

- De lo sencillo a lo complejo. Empieza por lo menos dificultoso. Por ejemplo: el índice, la bibliografía o el resumen.

2. Escribe un cuento o libro

¿Por qué no empezar a escribir hoy esa historia de ciencia ficción o de terror que siempre dices que “algún día” escribirás? Es momento de que abras un documento en Word o Google Drive y empieces a ensayar el inicio de tu primer cuento.

También podrías hacer ejercicios de escritura creativa, es una buena forma para desarrollar tu escritura. Por ejemplo:

- Pídele a alguien que te diga una palabra y trata de escribir una breve historia o un poema que incluya esa palabra.

- Toma una postal o fotografía y escribe una historia en base a lo que ves en la imagen y cómo te hace sentir.

Y si eres de los que ha escrito historias o poemas sin parar durante los últimos meses, ¿por qué no ir pensando en un futuro libro?

3. Crea tu portafolio

Es importante que, independientemente de tu experiencia y profesión, tengas un portafolio, es decir; una colección de documentos de trabajo y proyectos personales.

Hay muchas plataformas a la cuales puedes recurrir para crear tu portafolio: Behance, Carbonmade, Dribbble y WordPress.

Te recomendamos cuidar la redacción a la hora de describir tus proyectos, así como la calidad de las piezas visuales o audiovisuales. Las imágenes borrosas podrían ser tomadas como un descuido o falta de profesionalidad.

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4. Estudia uno de los tantos cursos online

Debido a la gran variedad de cursos online, seguramente no sabrás cuál elegir. Lo recomendable es que estudies un curso que realmente te interese, ya sea para mejorar tu perfil profesional, sacar a flote tu lado más creativo o aprender otro idioma.

¿Sabías que Crehana ha abierto cursos gratis para ti? Entérate cómo acceder a ellos en esta nota.

5. Arma un proyecto

Si hay algún proyecto que siempre has querido hacer, ¿por qué no trasladarlo a Word? No es necesario que lo termines en estos días, pero quizás podrías ir esbozando algunas ideas o hacer una lista de las herramientas y recursos que necesitas.

¿Es una web, una ilustración o un video? Empieza poco a poco.

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6. Optimiza tu perfil de LinkedIn

Se trata de una tarea alcanzable. ¿Estás pensando en cambiar de trabajo? Si es así, —como diría el maestro Yoda— actualizar tu perfil de LinkedIn debes.

¿A qué nos referimos exactamente? A que coloques una mejor descripción acerca de ti, agregues alguna habilidad que hayas adquirido recientemente, subas tus últimas certificaciones o añadas contenido multimedia a tu experiencia (enlaza documentos, imágenes o videos).

¿Qué otra actividad además de ver Netflix recomendarías? Ya sabes, elige una tarea o meta que sea alcanzable para ti. Si te exiges demasiado durante este periodo de aislamiento, podría ser contraproducente para tu salud. Busca opciones que, en lo posible, sean provechosas y flexibles.