Si te quedaste corto de palabras, conocer algunos ejemplos de recursos literarios para expresar tus ideas con mayor precisión te vendrá muy bien. Estos son clave para darle un toque personal a la redacción y, al mismo tiempo, atraer y entretener al lector.
Pero ¿ qué son los recursos literarios? Básicamente, son técnicas de escritura que utiliza un autor para darle forma a su texto y aportar expresividad. Por ejemplo, no es lo mismo decir "tiene el cabello rubio" que "tiene el cabello de oro", ¿verdad? Este recurso literario, que se clasifica como un tipo de metáfora, es tan solo uno de los disponibles para poder moldear mejor tus mensajes.
Existen casi tantos recursos literarios como tipos de textos; dependiendo de la finalidad de la redacción es que deberás elegir entre unos y otros. Para ayudarte con esa elección, en este artículo veremos algunos ejemplos de recursos literarios que podrás implementar en tus próximos escritos.
Antes que nada, es importante mencionar que hay tres tipos de recursos literarios:
- Recursos fónicos
- Recursos morfosintácticos
- Recursos léxico-semánticos
Toma lápiz y papel, abre el bloc de notas de tu laptop o de tu celular, pero no te quedes sin anotar estos ejemplos de uso retórico del lenguaje. Ahora sí, ¡comencemos!
Recursos literarios fónicos
Estos son recursos literarios que juegan con la fonética, es decir, con la manera de percibir las palabras de la manera cómo se escuchan. Algunos de los más habituales son:
1. Aliteración
¿ Qué es una aliteración? Se trata de una repetición del sonido inicial en varias palabras de un mismo verso, estrofa o frase. Ejemplos de este recurso literario:
- "La libélula vaga de la vaga ilusión", de Rubén Darío.
- "Oye el sórdido son de la resaca, infame turba de nocturnas aves", de Góngora.
- "Mi mamá me mima".
2. Onomatopeya
La onomatopeya es un recurso literario que consiste en una palabra formada por imitación de un sonido, ruido o incluso un fenómeno visual, con el que también está vinculada semánticamente.
Muchas de las onomatopeyas de la lengua se han transformado ahora en los emoticones que tanto usamos en las redes sociales. Algunas onomatopeyas pueden ser:
- Bip, aludiendo a un pitido agudo.
- Bla, bla, bla, aludiendo a una conversación.
- Crash, trayendo al escenario algo que se rompió.
- Din, don; como el sonido de un timbre.
- Gluglú —¡me ahogo!, tomo un rico vaso de agua, o me hago un baño de burbujas—
- Grrr, como el ronroneo de un gato.
- Hip, aludiendo al hipo.
- Hmmm, dudando con escepticismo.
- Jaja, jeje, jiji, jojo —dependiendo de cómo te rías, mejor te quedará uno de estos—
- Mmm, señalando que algo es delicioso.
- Muac, como el sonido de un beso.
- Ñam —¡esta comida está deliciosa!—
- Cuac, aludiendo al sonido que hace un pato.
- Guau, como saluda un perro.
- Kikirikí, como te despierta el gallo.
- Miau, como saluda un gato.
Imagen: Pexels
3. Calambur
De todos los recursos literarios, este es de los más extraños pero con gran uso en la literatura y en la música. Se trata de la agrupación de las sílabas de una o más palabras, de tal manera que se altera totalmente el significado de estas.
Otra forma de explicarlo sería diciendo que es un juego de palabras que tiene lugar cuando el reagrupamiento y redistribución de una o más palabras produce un sentido distinto en el texto, por ejemplo:
- La nueva escena, es cena compartida.
- ¿Éste es conde? Sí, éste esconde la calidad y el dinero.
4. Paranomasia
- “Compadre, ¡cómpreme un coco!”.
- “Compadre, yo no como coco, porque como poco coco como, poco coco compro”.
- “Tres tristes tigres comieron trigo en tres tristes platos”.
¿Entendiste qué es la paranomasia? Se trata de un recurso literario usado en los trabalenguas. Mejor dicho, es la acumulación de palabras de sonido parecido o análogo. Con mucha frecuencia va asociado a un juego de palabras.
Recursos literarios morfosintácticos o gramaticales
Si buscas cuáles son los recursos literarios que juegan con la morfología o la sintaxis para hacer juegos de palabras, los encontrarás en esta sección.
1. Anáfora
Es la repetición de una o más palabras al comienzo del verso, oración o de enunciados sucesivos. Normalmente se usan pronombres como él, aquél, éste, ella, quien, aquella, ésta, etc. para referirse a algo o alguien ya mencionado con anticipación. Por ejemplo:
- Quién lo soñara, quién lo sintiera, quién se atreviera.
- Hoy la tierra y los cielos me sonríen, hoy llega al fondo de mi alma el sol, hoy la he visto... La he visto y me ha mirado... ¡Hoy creo en Dios! —Gustavo Adolfo Becquer.
2. Anadiplosis
La anadiplosis es uno de los recursos literarios más utilizados, y consiste en la repetición de la misma palabra o grupo de palabras al final de un verso y al comienzo del siguiente.
Puedes encontrar ejemplos de recursos literarios de anadiplosis en esta canción de Maná: “Y en el pueblo le decían, le decían la loca del muelle de San Blás”.
Otros ejemplos de anadiplosis pueden ser:
- El mundo se encierra en tus ojos, ojos que no me quieren ver.
- Cuando camino por la calle y te veo, veo la luz de tu corazón que se refleja.
3. Concatenación
Junto con la Anadiplosis, se trata de recursos literarios parecidos entre sí, pero no se usa solo en un verso, sino también en prosa. Técnicamente, la concatenación es un uso reiterativo de la anadiplosis, el cuál puedes encontrar explícitamente en la versión unplugged de esta canción de Café Tacvba:
“Se pasa una noche buena
buena es la buena memoria
memoria del que se acuerda
se acuerdan de san Francisco
san Francisco no es Esteban
Esteban no es ningún santo (...)"
Imagen: Pexels
4. Derivación
Consiste en la combinación de palabras derivadas de la misma raíz. Sin duda, un recurso literario muy usado para darle vistosidad al texto, por ejemplo, en los chistes:
—¿De qué trabajas? —Soy bromista. —¿Haces bromas? —No, trabajo con bromo elemental a partir del bromuro potásico. —Ah, lo siento. —Es broma.
—¿Por qué los patos no juegan a fútbol? —Porque siempre quedan empatados.
Pero, para que lo entiendas a la perfección, las frases “vivir mi vida”, o “salgo a la nieve cuando está nevando”, son otros buenos ejemplos de derivación literaria.
5. Epífora
La epífora es una figura literaria basada en la repetición de una o varias palabras al final de varias frases o versos. Este recurso literario puede parecer que dificulta la comprensión del verso o texto, pero lo que se busca es darle una sonoridad y sorprender al lector con un recurso no habitual en la literatura española.
Y, para no ir muy lejos, otra vez citamos a Café Tacvba para darnos una clase de español:
"No te has imaginado
Lo que por ti he esperado, pues eres
Lo que yo amo en este mundo, eso eres
Cada minuto en lo que pienso, eso eres
Lo que más cuido en este mundo eso eres."
6. Complexión
¿Cuáles son los recursos literarios que combinan otros recursos? La complexión es uno de ellos. Básicamente, es una sucesión de anáforas y epíforas.
Según el sitio web Retóricas, “la complexión es una figura de dicción por repetición de palabras”. Ejemplos de este recurso literario:
- “El mar. La mar. El mar. Sólo la mar”. Rafael Alberti
- “Para venir del todo al todo, has de dejarte del todo en todo. Y cuando lo vengas del todo a tener, has de tenerlo sin nada querer”. San Juan de la Cruz
7. Polisíndeton
— “¡Después no puedes hacer nada ni dar cuerda al reloj, ni despeinarte ni ordenar los papeles!”—. Aunque el polisíndeton se encuentra entre los recursos literarios que podrían parecer un error estilístico, no lo es, para nada.
El polisíndeton es una repetición excesiva de conjunciones; es decir, las palabras que se utilizan para vincular palabras, sintagmas u oraciones.
En una enumeración común, las conjunciones suelen vincular los dos últimos elementos, mientras que los anteriores se separan con coma. Por ejemplo: “Había ensaladas, pastas, asado y miles de quesos”.
En el recurso literario del polisíndeton, en cambio, se utilizan más conjunciones que las habituales, lo que genera una sensación de énfasis. Siguiendo el mismo ejemplo: “Había ensaladas y pastas y asado y miles de quesos”.
Recursos léxico-semánticos
Dejamos para el final algunos de los recursos literarios más usados: los recursos léxico-semánticos, que se basan en el uso especial del significado de las palabras.
1. Antítesis
Es uno de los recursos literarios más comunes, que también aplica como concepto. Por poner un ejemplo general, podríamos decir que, en Los Vengadores, Loki es la antítesis de Thor.
Pero, si habláramos desde la literatura, podríamos citar a Neruda: “Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido”. O a Rubén Darío: “Cuando quiero llorar no lloro / y, a veces, lloro sin querer”.
2. Apóstrofe
El recurso literario de la apóstrofe es una figura comúnmente usada en las plegarias u oraciones de carácter religioso y en tono exclamativo. Sirve para dirigirse a alguien que puede estar presente, fallecido o ausente, así como a objetos inanimados o incluso al propio autor.
Un ejemplo de este recurso literario es la siguiente cita de Romeo y Julieta:
“Ven, noche gentil, noche tierna y sombría dame a mi Romeo y, cuando yo muera, córtalo en mil estrellas menudas: lucirá tan hermoso el firmamento que el mundo, enamorado de la noche, dejará de adorar al sol hiriente”.
Imagen: Pexels
3. Símil
Dicho en palabras coloquiales, el símil es un recurso literario de comparación. Shakira nos lo explicó bastante bien cuando en el 2000 con la frase: “Suerte que mis pechos sean pequeños y no los confundas con montañas”.
Pero también nos lo dijo Cervantes en El Quijote: “Solo una cosa tiene mala el sueño, según he oído decir, y es que se parece a la muerte, pues de un dormido a un muerto hay muy poca diferencia”.
4. Epíteto
Usado como recurso literario, el epíteto es un adjetivo que añade o subraya datos básicos y cualidades definitorias de numerosos personajes y lugares. Vamos a hacerlo muy fácil: el “dulce azúcar”, la “fría nieve” y el “cálido sol” son epítetos; es decir, los adjetivos antepuestos al nombre.
5. Hipérbole
Si te preguntabas cuáles son los recursos literarios para exagerar, aquí encuentras uno, que, de hecho, es el único que cumple esa función. La hipérbole consiste, justamente, en exagerar cualquier medida lógica de manera estrambótica con el objetivo de agrandar o hacer notar una acción o cosa.
Es muy propia del lenguaje coloquial y burdo, por lo que su uso como recurso literario se extiende muy por fuera de un lenguaje técnico o erudito.
“Nunca encontraré a nadie que se parezca a ti”, “eres lo más bello que existe en el planeta” o “no puedo vivir sin ti”, ¿te suenan familiares? ¡Son hipérboles!
Imagen: Pexels
6. Metonimia
El recurso literario de la metonimia te servirá bastante para aprender escritura creativa y crear historias inolvidables. Se refiere al uso de un término por otro con el que mantiene relación de dependencia, causalidad, contigüidad o procedencia.
La cicatriz de Harry Potter, por ejemplo, es un elemento narrativo que representa un episodio oscuro en la vida de Harry. Pero también, cuando escuchas “un Picasso” comprendes que se hace referencia a un cuadro de Pablo Picasso, ¿no?
7. Imágenes
Si leíste El Perfume, de Patrick Süskind, probablemente conoces muy bien de qué trata este recurso literario. Con palabras y frases puedes crear "imágenes mentales" para el lector que, dado el ejemplo citado, no siempre son para agradar. Las imágenes literarias ayudarán a tus lectores a visualizar y experimentar lo que describes de una manera más realista.
Vale aclarar que las imágenes no se limitan sólo a provocar sensaciones visuales, sino también se refiere a las experiencias olfativas, táctiles, gustativas, térmicas y auditivas. Volviendo a El Perfume, lo que encontrarás son descripciones muy explícitas de un ambiente hostil, desagradable y asqueroso.
En un libro como Los Pilares de La Tierra de Ken Follet, en cambio, sabrás a la perfección cómo es una catedral físicamente, conocerás su estructura, pero también sabrás a qué huele una ciudad. Lograr estas sensaciones es uno de los principales objetivos de los recursos literarios.
8. Interrogación retórica
Este recurso literario te permite preguntar sin esperar una respuesta específica, más bien te servirá para intensificar el contenido. Por ejemplo:
- “¿Cuántas veces tengo que decirte que estudies?”
- “¿Cuándo acabará este martirio?”
9. Ironía
La ironía es una figura literaria situada entre el humor y la sátira, que consiste en decir -o hacer significar- lo contrario de lo que se dice. Como recurso literario, se trata de una estrategia verbal que permite desplegar de manera simultánea dos significados contradictorios entre sí. Por ejemplo:
- “Matemática era la materia que más me costaba, y hoy estudio ingeniería”.
- “Pasé una hermosa tarde, llorando solo en mi habitación”.
10. Sinestesia
Por último, la sinestesia es ese recurso literario desde el cual se le atribuye una sensación a algo que no corresponde directamente. Por ejemplo:
- “Me quemó con su mirada”.
- “Sentí que me abrazaba con su voz”.
Imagen: Pexels
Bonus track: guías para mejorar tu redacción
Si te preguntabas cuáles son los recursos literarios más adecuados para desarrollar tu propio estilo, acabas de ver que tienes más de una decena de recursos y posibilidades para contar lo que desees de una manera original que, desde luego, requerirá práctica y constancia.
Si lo que te preocupa es la ortografía y las técnicas de redacción, quizás estas guías te puedan ayudar y, de paso, puedas mirar qué palabras tienen particularidades con el uso de acentos y tildes antes de elegir los recursos literarios para tu escritura.
1. Guía de ortografía básica
Al momento de redactar cualquier texto, ya sea un libro o un simple correo electrónico, siempre debes aplicar las normas de escritura. De lo contrario, por más que utilices los mejores recursos literarios y hagas una redacción súper creativa, si tu texto contiene errores ortográficos no se verá muy profesional.
Escribir correctamente puede resultar un poco complicado a veces. Por eso, te compartimos esta guía de ortografía básica en la que podrás encontrar las normas de escritura más importantes.
➤ Descarga la guía de ortografía básica gratis
2. Guía del copywriting
El primer paso para ser un buen copywriter, incluso antes de saber usar los recursos literarios, es tener una ortografía impecable. Por eso, a continuación te compartimos una guía con las reglas ortográficas básicas de copywriting que debes dominar para que solamente te preocupes por darle rienda suelta a tu creatividad.
¡Usa esta guía muy bien! El copywriting puede ser una excelente alternativa de ingresos mientras vas construyendo tu carrera de escritor.
➤ Descarga la Guía del copywriting
3. Plantilla de guión literario
Un guión literario es un documento muy importante al momento de realizar cualquier producción audiovisual, ya sea una película, un cortometraje, un documental, etc. Aquí es donde se indica qué acciones y diálogos se van a incluir dentro de la historia.
Esta plantilla de guión literario te permitirá tener una idea más clara sobre cómo narrar lo que deseas transmitir, y en qué partes incluir esos recursos literarios que has elegido para tu historia. Además, este documento te permitirá precisar información como el tiempo y el lugar en el que se desarrolla cada escena.
➤ Descarga la Plantilla de guión literario
Entonces, ¿quieres vender libros y que te llamen y te escriban y te busquen y te digan que te quieren? —te dijimos que esto es polisíndeton, ¿verdad?—. No se trata de cuántos recursos literarios haya, ni de cuántos alcances a utilizar en un texto.
Majo Moirón, profesora del curso El arte de la escritura, explica que “no hay reglas absolutas a la hora de escribir un relato”. Por ello, lo que importa es que, al final del día, puedas expresar claramente lo que quieras decir.
Cuéntanos, de esta lista, ¿cuáles son los recursos literarios con los que más te identificas?
No olvides revisar nuestros cursos de Escritura para practicar tu redacción y profundizar tus conocimientos sobre composición y técnica. ¡Éxitos!