La regla de tres es una de esas técnicas y estrategias para la creación de contenidos que no esperarías que funcione y, sin embargo, lo hace. Parece una especie de truco y, en efecto, lo es, dado que se trata de una fórmula lógica que utiliza 3 elementos para ofrecer una solución al lector.
¿Cómo es esto posible? ¿Puede una fórmula matemática utilizarse para crear contenido? ¿Cómo puedo implementar la regla de tres para crear contenido de engagement? ¿Qué tipos de reglas de tres puede utilizar para mi estrategia de contenidos?
Si estas preguntas no rondaban tu mente, es demasiado tarde. Ahora son muchas las interrogantes, por lo que te recomiendo que sigas leyendo pues, con esta nota, aprenderás a utilizar la regla de tres para crear contenido que atrape y nunca más verás las matemáticas de la misma forma.
¡Vamos a empezar!
¡Ey! Tres palabras y una frase memorable. Ahora sí. ¡Empecemos!
Regla de tres y creación de contenidos
Si no sabes qué es la regla de tres, quizá quieras empezar por aprender cómo hacer una regla de tres, pero en esta nota puedes dejar de lado la calculadora, pues no la necesitaremos.
Lo cierto es que utilizaremos la regla de tres para organizar la información. A nuestro cerebro le es mucho más sencillo entender y recordar información que se presenta en bloques y, más importante aún, en listas de 3 elementos.
Alguna magia tendrá el número tres, ¿no lo crees? Porque esta estructura está presente en diferentes elementos y recursos. Por un lado, la estructura de los tres actos es básica para cualquier persona que desee escribir una historia.
Las trilogías son otro gran recurso para estructurar historias, desde la literatura al cine. Piensa en Star Wars, por ejemplo, donde todas las películas se han separado en ciclos de 3 películas, lo que determinan los eventos más importantes y desencadenantes de la saga.
Por ejemplo, las historias encadenadas con eventos se pueden simplificar en una secuencia de tres partes:
1. Situación.
2. Reacción.
3. Resolución.
Aquí hay otra regla de tres, en el que la incógnita aparece junto con la situación. Por ejemplo, piensa en El día de los trífidos (1951), novela de John Wyndham. La situación inicial es que gran parte de la población ha perdido la vista y hay una horda de plantas carnívoras buscando alimentarse de carne humana. ¿Qué va a pasar?
En el segundo elemento, los personajes reaccionan a la situación inicial y se desencadena la trama hasta llegar al tercer elemento, que por supuesto, no te voy a revelar por si te interesa resolver la incógnita por tu cuenta.
Si lo piensas, la regla de tres funciona como un ejercicio de escritura creativa, en que te comprometes a escribir una historia utilizando bloques de tres secuencias.
Por otro lado, encontramos diferentes fábulas y narrativas que recurren a la presencia de tres personajes para quedarse en la memoria del lector, lo que vuelve a las historias y sus elementos más entrañables.
¿Te suenan algo de esto? Los tres cochinitos, Los tres osos, los tres ratones ciegos, los tres mosqueteros, y El bueno, el malo y el feo. Si analizas las narrativas que recuerdas, aquellas que se quedaron grabadas en tu memoria, encontrarás una regla de tres.
1. Establece tu incógnita
En matemáticas, la regla de tres funciona para descubrir una incógnita, un número perdido. Para la creación de contenidos, no es diferente. El primer paso para crear contenido usando la regla de tres es definir una incógnita, esto es, un problema que quieres solucionar en tres pasos, una metodología que vas a resumir con tres viñetas, un objetivo que debe cumplirse con una secuencia de tres acciones.
Lo importante en este primer paso es que pienses en un problema, un misterio, una pregunta, que se resolverá con una regla de tres.
Al crear contenido, lo primero que nos preguntamos es cuál es el punto de dolor de nuestros usuarios y elaboramos una solución. Al utilizar la regla de tres, piensa que la solución a tu pregunta es la incógnita que debe descubrir el lector.
Por ejemplo, en esta nota, el encabezado dice: “¿cómo utilizar la regla de tres para crear contenido?”, aquí te presento una incógnita. Lo primero que pensamos al leer una pregunta no es la respuesta, sino el misterio. Ese misterio es atractivo porque es algo que, de base, no creemos posible.
Muchos blogs publicados en Crehana parten de esta premisa: una incógnita: un problema que el usuario busca resolver.
Así que, recuerda: establece una pregunta sobre un problema que puedes resolver.
Fuente: Pexels
2. Define los 3 elementos que rodean a la incógnita
El segundo paso para crear contenido utilizando la regla de tres es definir los tres elementos que responderán a la incógnita inicial. Estos elementos pueden presentarse como una serie de bulletpoints o lista numerada dependiendo de tu pregunta; lo importante es que la regla de tres debe presentarse como una lista.
En su libro Storytelling (2017), Carlos salas habla de las listas y dice lo siguiente:
“Desde un punto de vista cognitivo, las listas o los listículos tienen una ventaja: ahorran tiempo al lector. Los periodistas usamos mucho este género, en especial cuando hay que explicar cosas complejas”.
Presentar los elementos de la regla de tres en forma de lista te permite organizar mejor las ideas antes de presentarlas al lector, y para el lector, esto le facilita el proceso de asimilación y de entendimiento del texto.
Por ejemplo, una manera eficaz de recordar la información de tus clases es tomar apuntes con viñetas, pues así organizas la información y para tu mente es más fácil de recordar.
Parece que desde pequeños nos enseñan a retener conceptos en forma de listas, ¿no crees?
2.1. Escribe usando la regla de tres en diferentes situaciones
La regla de tres también se puede aplicar a frases cortas, que pretenden establecer una incógnita, para que el lector se involucre y sea capaz de adivinar por deducción. Por ejemplo, piensa la siguiente frase:
“En el mundo, solo hay dos personas que saben explicar la teoría de la relatividad; a la otra no la conozco”.
Usando la regla de tres estructuramos una oración que establece una incógnita, ¿quién es la otra persona que puede explicar la teoría de la relatividad? El narrador. Para entenderlo mejor, hay que separar la frase de la siguiente forma:
- En el mundo,
- solo hay dos personas que saben explicar la teoría de la relatividad;
- a la otra no la conozco.
De esta manera, invitas al lector a que intente adivinar el sentido de la frase, sin mencionar que es una frase memorable, breve y fácil de recordar, es por ello que, para el sitio web Copyblogger, la regla de tres es perfecta para el copywriting.
En este mismo sentido, Sofia Niño de Rivera, profesora de nuestro curso online de Stand up comedy para no comediantes, menciona cómo puedes utilizar la regla de tres para construir un chiste:
“La regla de tres es que la tercer cosa que dices debe ser la cosa más chistosa de lo que estás diciendo, y la más sorpresiva. Usas la una y la dos para armar el chiste y lo rematas con la tercera”.
Entonces, recuerda: resuelve tu pregunta con tres elementos para implementar la regla de tres.
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3. Relaciona tus elementos y resuelve la incógnita
El tercer paso es la resolución o revelación de la incógnita. En este punto, resuelves el misterio o cierras el problema. Aquí está todo el propósito de tu regla de tres, puesto que si añades un nuevo elemento o no resuelves la interrogante, no habrás logrado tu objetivo de comunicación.
Un aspecto importante de este último paso es que tus elementos deben ser coherentes entre sí. Incluso cuando hablamos de un chiste, el tercer elemento es coherente aunque sea inesperado, el remate se anticipa desde la introducción del chiste, para ser un giro inesperado.
Si los tres elementos en tu regla de tres no son coherentes, vas a generar confusión y rechazo, por ejemplo, imagina que lees un artículo sobre 3 tipos de cupcakes que puedes preparar en Halloween y, al llegar al punto tres, te topas con lo siguiente: “3. Sopa de pollo”. Aunque estemos hablando de comida, en lugar de solucionar la incógnita (tipos de cupcakes), el elemento crea varias preguntas que confunden y desilusionan al lector.
Al inicio de tu contenido, las dudas e incógnitas son perfectas para llamar la atención del lector, pero fatales al final de tus ideas. Piensa en todas las historias que te han decepcionado por dejar tantas incógnitas en la resolución, ¿de verdad quieres hacerle eso a tus lectores?
Estoy seguro de que no, así que no lo olvides: relaciona tus elementos con la regla de tres para crear buenos contenidos.
Fuente: Pexels
¡Ya tienes todo lo que necesitas para crear contenidos usando la regla de tres!
Ahora es momento de poner en práctica lo aprendido. Puedes desarrollar lo aprendido con esta guía de copywriting desde cero. Si buscas ideas para utilizar la regla de tres, siempre puedes consultar nuestros cursos online de escritura. Lo importante es dar el siguiente paso y crear tus propios contenidos utilizando este método.
¡No pierdas tiempo!