Formatos flexibles: ¡conoce la clave para los nuevos modelos empresariales!

Ante los múltiples cambios en los entornos laborales, los formatos flexibles marcaron un antes y un después dentro de las empresas de la actualidad. Tanto los empleadores como los colaboradores se vieron alcanzados por una realidad que les obligó a innovar y a ser más creativos para que las compañías pudieran ser lo más productivas posibles.

Ante la crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19, las empresas se vieron en la necesidad de dejar a un lado los modelos tradicionales de trabajo y apostar por los formatos flexibles. En este sentido, el trabajo de oficina dio cabida a una mayor flexibilidad, en la cual el personal tenía la posibilidad de trabajar desde la comodidad de su hogar.

Y este modelo, con simpatizantes y detractores, ha conseguido implantarse en muchas empresas. Sin embargo, son muchos los empleadores que no ven claro del todo utilizar los formatos flexibles. ¿Quieres saber más al respecto?

En este post, te enseñamos qué son los formatos flexibles, sus ventajas y desventajas, al tiempo que te aclaramos el panorama sobre si este modelo adaptable tendrá cabida en los entornos empresariales los siguientes años. ¡Acompáñanos!

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¿Qué son los formatos flexibles?

Básicamente, los formatos flexibles de trabajo son aquellos que se alejan de los modelos laborales tradicionales. Es decir, ya no se trata de ir a una oficina a ejercer tus funciones y cumplir un horario (comprendido entre las 6 y 8 horas, aproximadamente), ahora las compañías han adoptado nuevas formas en las que los colaboradores se sientan más autónomos, empoderados y, por supuesto, más productivos.

Según menciona Maia Mazar, docente de nuestro curso online de Cultura de trabajo remoto: Nuevas y buenas prácticas, tras la crisis sanitaria "todos hemos tenido que adaptarnos a trabajar desde casa y la transición no ha sido fácil: transformamos espacios, agendas, reuniones...", por lo que tanto las empresas como los colaboradores tuvieron que adaptarse a una nueva realidad.

Es así como las empresas han pasado a modelos flexibles de trabajo, el cual ha sido muy bien recibido por las nuevas generaciones:

• Millenials (nacidos entre los años 1981 a 1996).

• Centennials (también llamados Generación Z, nacidos entre 1997 a 2012).

Esos grupos se han sentido especialmente motivados por la implantación del modelo de trabajo remoto, en primera instancia y, tras la vuelta a la oficina, del trabajo híbrido. Ahora bien, ¿qué ventajas ofrecen estos nuevos modelos?

¿Cuáles son las ventajas de los formatos flexibles?

Antes de aclarar las ventajas de los formatos flexibles, debemos hacer una aclaración importante: si bien antes de la crisis sanitaria ya existían ciertas empresas que tenían puestos de trabajo en modalidad remota, sería este evento mundial el que haría reflexionar a muchas empresas sobre la idoneidad de apostar por modelos innovadores.

Por este motivo, son muchas las empresas que han apostado por establecer modelos de espacio ágiles, los cuales cuentan con una serie de ventajas y beneficios que te detallamos a continuación:

1. Optimización de costes

Esta es una de las principales ventajas de los formatos flexibles. Tanto para las empresas como para los colaboradores, este tipo de solución ha significado una reducción importante de costes y servicios que ofrecer.

Para las compañías implica que no tienen que mantener un espacio de trabajo equipado para mantener a decenas o cientos de empleados bajo un mismo techo. Ahora, independientemente de que haya modalidad remota o híbrida, las empresas reducirán costes como los de suministros o los de mantenimiento, pues no requieren de muchos implementos. 

Por su parte, el personal también se ve beneficiado por los formatos flexibles, pues no requiere de gastar en transporte o en comida, por ejemplo.

2. Mayor flexibilidad

La principal ventaja de los formatos flexibles es, precisamente, el tema de la adaptabilidad que ofrecen a los colaboradores. Y esto no implica que haya un descenso en cuanto a la productividad, sino más bien lo contrario.

Si a una persona se le concede la autonomía en el trabajo, se sentirá más empoderada y podrá coordinar mejor sus tiempos. Al tiempo que también se verá respaldada por sus supervisores, pero siendo consciente de que tiene un deber que cumplir.

El hecho de estar en una oficina no implica que los empleados sean más productivos y eso es algo que están asimilando las empresas con los formatos flexibles.

3. Networking adecuado

Los espacios flexibles, aunque no lo parezca, han desarrollado una gran ventaja: se han creado conexiones entre las empresas, así como nuevas vías y oportunidades de mercado. ¿Qué significa esto?

Que gracias a los formatos flexibles, las compañías tienen la posibilidad de ponerse en contacto con potenciales clientes de forma mucho más directa y cercana. 

4. Atracción y retención de nuevos talentos

Los formatos flexibles despiertan el interés dentro del mundo laboral, debido a que no todas las empresas ofrecen este tipo de concesiones. Por ende, son muy bien vistas tanto por sus propios colaboradores como por personas interesadas en formar parte de esta organización.

Como te mencionamos anteriormente, las generaciones más jóvenes dentro de la fuerza laboral (millennials y centennials) ven con buenos ojos formar parte de una compañía que no posea los cánones tradicionales y busque siempre estar a la vanguardia en cuanto a las nuevas tendencias se refieren. Y esto es lo que representa un formato flexible de trabajo.

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5. Construcción efectiva de equipos

Pese a que puede pensarse que los formatos flexibles tienden a aislar a los colaboradores o que no suelen estar tan vinculados como cuando trabajan de forma netamente presencial, una estructura adaptable facilita una buena capitalización de las fortalezas de las que disponga su equipo de trabajo.

Un equipo flexible es capaz de manejar diversos desafíos, ocasionando que la compañía sea mucho más efectiva. Por el contrario, un entorno rígido suele generar que los empleados realicen actividades para las que no cuentan con un grado alto de experiencia.

6. Más competencia

La competitividad en los equipos de trabajo no suele ser bien vista, ya que pareciera invitar a los roces y a las disputas. Sin embargo, ser competitivo no necesariamente debe traer perjuicios a tu empresa.

En una compañía más rígida, con modelos de trabajo más mecánicos es probable que, ante la aparición de diversos desafíos, no se pueda adaptar y terminan fallando sus equipos. Sin embargo, una empresa con formatos flexibles suele ver el cambio como una oportunidad de crecimiento, reconociéndolo como un evento inevitable pero, no conforme con ello, procede a aprender de él y utilizarlo para mejorar y crecer.

Este carácter de los grupos flexibles lo genera la propia competitividad.

7. Mejores horarios

Como te mencionamos anteriormente, un formato flexible brinda una mayor felicidad al colaborador, dándole muchas más opciones de vivir su vida personal con normalidad y poder cumplir con sus otros compromisos y responsabilidades (familiares o sociales, por ejemplo).

Los formatos flexibles suelen generar una mayor vinculación y lealtad de los colaboradores hacia la empresa.

8. Aumento de la eficiencia

Por lo general, evaluar y revisar constantemente las políticas empresariales suele ser de gran ayuda para que las empresas puedan reconocer e identificar la mejor forma para realizar los procesos.

¿Qué ocasionará el formato flexible? Que la compañía se volverá, no solo más productiva, sino también mucho más eficiente, generando grandes ganancias.

Estos son algunos de los principales beneficios de los formatos flexibles. Sin embargo, como no todo puede ser perfecto, existen una serie de desventajas sobre este modelo laboral que no podíamos dejar pasar.

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¿Cuáles son las desventajas de los formatos flexibles?

Así como hay varias ventajas de los formatos flexibles, también existen ciertos inconvenientes sobre este modelo que han servido como argumentos para que varias empresas se nieguen a dar el paso al cambio de modelo.

1. Desbalance en la brecha salarial

Uno de los principales inconvenientes que puede traer el sistema presencial a las oficinas en un formato híbrido es que aquellos colaboradores que acudan a la oficina obtengan mayores aumentos que aquel que solo asiste de forma remota.

Esto puede generar consecuencias negativas en cuanto a las brechas salariales e, incluso, en la equidad de liderazgo.

2. Muchos empleadores se oponen

Pese a que los formatos flexibles están teniendo mayor recepción en las compañías y muchas organizaciones se muestran partidarias de este tipo de sistema, existe cierta disconformidad por aplicar este modelo en muchas compañías.

Según un estudio realizado por Best Practice Institute, el 83% de los directivos y empleadores a nivel mundial quieren que sus colaboradores estén en las oficinas a tiempo completo.

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3. Pueden haber diferentes expectativas

Una de las mayores preocupaciones de los empleadores sobre los formatos flexibles es que pueda disminuir la productividad de los trabajadores, al no tener que acudir a un espacio a tiempo completo. Por este motivo, son muchos los que, bajo modelo remoto o híbrido, han demandado que sus empleados estén disponibles en cualquier momento que sea requerido, solo por mantener un horario de trabajo con flexibilidad.

Esto ha afectado a muchos equipos de trabajo, especialmente durante la crisis sanitaria. Muchas personas se sentían agobiadas, incluso trabajando de forma remota dado que sus empleadores les escribían en horas fuera de su espacio laboral.

Para evitar esto, es fundamental que te comuniques bien con tu empleador y ambos tengan un control claro sobre las expectativas de ambas partes durante la jornada y tener claros los objetivos. Deben establecerse normas y evitar cualquier roce entre miembros de equipos.

4. Mayores complicaciones para la comunicación

Durante la cuarentena, muchos trabajadores tuvieron que apostar por herramientas de comunicación (Skype o Zoom) que, si bien eran de gran utilidad, no eran sistemas perfectos ni estaban diseñadas para ser recursos de comunicación laboral infalibles. Por ello, muchas reuniones virtuales tuvieron problemas y se complicó la comunicación entre los equipos de trabajo.

Ahora, cuando el modelo remoto está mucho más instaurado y se han desarrollado más herramientas y funciones colaborativas para los equipos de trabajo han aumentado la comunicación que existe entre ellos. Aún así, la comunicación constante entre los equipos es menos fluida que antaño, pues no está el factor de verse constantemente en la oficina.

Formatos tradicionales vs. Formatos flexibles

Actualmente, son muchas las empresas que mantienen el formato presencial. Poco a poco, las empresas han pedido a sus colaboradores que acudan a sus puestos de trabajo, pero no es este el deseo de muchos colaboradores.

Según revela un informe de la consultora Gartner, 4 de cada 10 empleados han afirmado que se marcharían de su empresa, en caso de que se les insista volver a un entorno presencial. Los formatos flexibles han tenido un impacto positivo para muchos empleados, que ven cumplidas sus aspiraciones laborales y tienen mayor libertad para compaginar sus distintas actividades diarias.

Por este motivo, muchas compañías están buscando la manera de adecuar las condiciones para que ambas partes resulten satisfechas. El modelo híbrido (unos días trabajo presencial, otros remoto) es una de las alternativas, pero aún quedan muchas incógnitas por resolver para la implantación total del sistema remoto en las compañías que así lo requieran.

Sin embargo, se están dando los pasos tecnológicos y empresariales necesarios para que, en un futuro, los formatos flexibles sean una realidad en todos los trabajos del mundo.

Los formatos flexibles llegaron para quedarse. Son muchas las compañías que están mutando sus modelos de trabajo y están aspirando a mejorar y adaptarse a las nuevas tendencias empresariales.

Y los formatos flexibles son, precisamente, un nuevo paso en la escala evolutiva de estos entornos. Gracias a estos modelos, tu compañía tendrá la posibilidad de ofrecer una ventaja competitiva con respecto a su mercado, ya que podrá anticiparse a escenarios potenciales y tendrá una mayor capacidad de respuesta ante cualquier elemento imprevisto de su entorno, que siguiendo un modelo tradicional.

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